Si optas por la adopción, eliminar pulgas será uno de los primeros pasos

La tentación de comprar un cachorrito siempre es grande, pero, para los auténticos amantes de los animales, la opción de la adopción es primordial. Dar una segunda oportunidad a un perro que vive en la calle y espera una familia puede aportarnos más beneficios que ‘estrenar’ un nuevo mejor amigo. La ilusión de tener una nueva mascota en casa se presupone, pero las responsabilidades que ello conlleva suelen ser unas cuestiones que, en ocasiones, quedan relegadas a un segundo plano. Error. Saber cómo vamos a cuidarlo, para que su salud sea una máxima, es de vital importancia, como el hecho de elegir buenas pipetas antiparasitarias para asegurar su integridad e higiene y eliminar las pulgas en los perros.

Salvar la vida a un animal ofreciéndole nuestro hogar y amor pasa también por tener en cuenta la importancia de una buena desparasitación, tanto interna como externa. Esta última pasa por confiar en pipetas para perros, en función de su peso, cuyas calidad y fiabilidad nos aseguren eficacia para eliminar pulgas y garrapatas. No es que por ser adoptado vaya a tenerlas, ya que cualquier animal está expuesto a este riesgo, pero sus defensas podrían estar debilitadas y las pipetas de perros pueden ayudarnos a que no estén tan débiles ante las enfermedades que transmiten.

Aunque adoptar a un perro sea un acto bondadoso, no todos deberíamos hacerlo. Has de tener claro qué podemos ofrecer a este animal, si vamos a poder cubrir satisfactoriamente todas sus necesidades alimenticias y emocionales, en qué manera podría cambiarte la vida tenerlo y también cómo afrontarías su custodia ante imprevistos o durante las vacaciones. Si aun así estás listo para hacerlo: enhorabuena, acabas de ganar un fiel amigo.

Durante las primeras semanas del perro en tu casa, debes poner atención en ciertos aspectos, para que su adaptación vaya sobre ruedas:

• Primero, debes tener en cuenta que algunos lo han pasado mal antes de acabar en tus manos, por lo que les costará coger confianza y perder el miedo.
• No le fuerces en las primeras caricias. Centra tus mimos en el lomo y pecho, pero evita la cabeza. Comparte esto con personas de tu entorno, para que no se lleven sustos.
• Es normal que pierdan el apetito con el cambio del entorno. No te preocupes: mantén agua limpia y la comida constante y acabarán comiendo sin problemas.
• Si tienes otro perro, preséntalos fuera de casa, en un entorno tranquilo y neutral, como un parque. Retira los juguetes para evitar roces innecesarios o los celos y controla sus contactos durante los primeros días.
• A la hora de pasear, es mejor hacerlo con arnés para evitar imprevistos. Aún es pronto para que disfruten del parque suelto y, para mayor seguridad, la correa fija es mejor que la extensible.

Llévale pronto a su veterinario, su nuevo mejor amigo, además de ti mismo, que te ayudará a guiarte para que su salud sea de hierro y, por supuesto, libre de pulgas y garrapatas.