Lo que has de saber sobre las pipetas para perros

Pipetas para perros, los grandes aliados contra las pulgas, garrapatas y leishmaniosis.

Las pipetas para perros (pipetas antiparasitarias o pipetas repelentes) son una de las soluciones ideales para paliar los problemas que tu perro pueda tener con los ataques de determinados insectos y ácaros. Sabemos que no quieres pasar por este trance y, si ya has tenido que afrontarlo, estarás deseando que no se repita. Por lo tanto, vamos a darte una serie de consejos para que puedas mantener a raya a los parásitos que pueden molestar a tu perro. En primer lugar, vamos a recordar los nombres de estas amenazas para nuestras mascotas (también afectan, por ejemplo, a los gatos). Básicamente son pulgas, garrapatas y mosquitos. Sin lugar a dudas, las pulgas son los insectos que, en este sentido, más quebraderos de cabeza, como las enfermedades que transmiten, nos van a provocar. Por lo tanto, tenemos que poner remedio a los problemas que les causan y usar pipetas para perros es la alternativa idónea (junto a soluciones integrales, como los collares y la limpieza). Ten en cuenta que la época más peligrosa es el verano, puesto que estos parásitos proliferan, especialmente, en esas condiciones de calor y humedad.

Precauciones antes de administrar una pipeta a un perro

Has de tomar precauciones especiales en esa estación, pero también debes estar atento a si tu perro se rasca más de lo normal. Por otra parte, los perros enfermos tienen mayor propensión a ser atacados por las pulgas. De ahí viene el viejo dicho de que «a perro flaco todo son pulgas«. No obstante, los perros sanos también pueden acabar llenos de pulgas. Por ejemplo, si se las contagia otro perro (las pulgas dan saltos de hasta 30 centímetros) o han estado en zonas en las que hay población abundante de estos parásitos.

Recomendaciones de uso de pipetas para perros

Para que las pipetas para perros funcionen perfectamente, has de tener en cuenta ciertas recomendaciones. Primeramente, elige las que tengan una concentración de insecticida o antiparasitario acorde con el tamaño de tu perro, pues no requerirá la misma un pastor alemán que un caniche. En segundo lugar, no tienes que haber bañado al perro en los dos días anteriores. Tampoco has de hacerlo en los dos siguientes, ya que neutralizarías el efecto de la pipeta. Es de vital importancia que sepas aplicar el contenido de la pipeta, el cual se ha de extender por la piel y no por el pelo. Para que eso suceda, reparte el líquido entre las zonas de la nuca, el medio lomo y el inicio de la cola. Haz esta operación con cuidado para no derramar el líquido por el suelo. De hecho, te conviene llevarla a cabo en un lugar en el que tu mascota se sienta tranquila.

Por último, te aconsejamos que no juzgues los efectos del producto, al menos hasta que haya pasado un día entero. Elige pipetas que sean de calidad y no eches mano de las que están caducadas.